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FRANCIA, TRICAMPEONA FED CUP. KRISTINA MLADENOVIC EXHIBE A BARTY: DOS DERROTAS EN OCHO HORAS.

Oscar Rodríguez Gómez
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Único reducto seguro de la socialización del tenis, los campeonatos por equipos se afianzan en el planeta de la belleza y la estrategia. La renovación del mohoso formato Copa Davis y el poder mediático de la Copa Laver están construyendo esa modalidad para el presente (el futuro está aquí hace rato; no hay que acabárselo) y Copa Fed, máxima aspiración de las mujeres tenistas trabajando en conjunto, demostró durante dos días la diferencia entre lo individual y lo colectivo cómo existencias simbióticas. Y Fed Cup se erige como hasta el momento mejor evento tenístico del 2019, año que se despide con la bella Francia en la cima.

 

“- Siempre tendremos Paris”, dice Bogey a una lánguida Ingrid de la quese despide en “Casablanca” (1943). Media hora antes, el perseguido político que encarna Paul Henreid espeta en la cara de los borrachos nazis, con la orquesta y todos los comensales, “La Marsellesa”. Inmaculada e insuperada escena de patriotismo en plena WWII, himno

a la independencia fiera ante enemigos que profanen su suelo y a sus

 ciudadanos, cada evento en que se escucha de algún modo conmueve.

Imaginaria Flor de Lis sobre la copota de plata en la mano colectiva del

equipo de Francia, el encanto del canto patriótico de mayor

emblemática en la historia resonó en el RAC Center de Perth:

 

Allons enfants de la Patrie

Le jour de gloire est arrivé

Contre nous de la tyrannie

L'étendard sanglant est levé…

 

Aux armes citoyens! Formez vos bataillons!

Marchons, marchons,

Qu'un sang impur abreuve nos sillons

 

Y es que Francia ganó un decisivo partido de dobles para asegurar una dramática victoria en la Fed Cup Grupo Mundial ante Australia y su número uno del mundo, que valió queso. Ashleigh Barty exhibió su corrientez egocéntrica, horribles ojos de toro loco por las palizas recibidas, una musculatura hombruna tipo la bestia negra  y un juego de distractores carentes de la magia y poder del sexo encarnados en la Reina absoluta del campeonato, Kristina Mladenovic.

 

La bombshell de sangre serbia (doblemente sexy la güerota ciudadana de Francia) y una Caroline García muy repuestita, triunfaron en el último partido de dobles para darle a Francia la victoria en la Fed Cup by BNP Paribas 2019. Es el tercer título de la Fed Cup de Francia, y la primera en 16 años. El espíritu competitivo del combinado Galo de bellezas peleadoras sacó el aura de ganador, auspiciado en una actitud encomiable por parte de Kristina Mladenovic, consiguiendo ser partícipe de los tres puntos del equipo dirigido por Julien Benneteau, dos de aquellos aplastando a la que ya se descubrió es Uno no del mundo, sino de ella misma.

Polarizado el contraste con una amante de su país, de su hombre (afortunado Thiem) y de su disciplina, Kristina Mladenovic rinde por encima de su nivel medio cada vez que se engalana con los colores de Francia. Ya el primer día del campeonato consiguió derrotar por un contundente doble 61 a Ajla Tomljanovic, pero este domingo 10, Mladenovic consiguió un primer triunfo ante Ashleigh Barty en tres agónicos sets. Kiki estuvo espectacular con su servicio, terminando el encuentro con cuatro saques directos y ganando el 88% de los puntos jugados con su segundo servicio. Eso no impidió algún despiste por su parte, que permitió a Barty mantenerse con opciones hasta el final de cada set. Pero en los momentos cumbre, salieron esos intangibles pases mágicos que decantan la balanza de uno u otro lado. En Copa Fed, Mladenovic es experta en esos detalles, y cerró el partido con un marcador de 26, 64 y 76 (1) en dos horas y cuarenta, y era apenas el primer match del día del juicio.

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Francia tenía la oportunidad de poder cerrar la eliminatoria y contra todo pronóstico, Julien Benneteau decidió sacar a Caroline Garcia de la ecuación y metió a Pauline Parmentier. El cambio no sirvió de mucho, y es que su rival, la por fin destapada belleza de Ajla Tomljanovic, apoyada por 13,500 miembros del público australiano (los 500 fans franceses presentes, sin duda la mejor porra de tenis, nunca dejaron de cantar) consiguió la proeza y volvió a poner en tablas la eliminatoria global. 64 y 75 fue el resultado final a favor de la jugadora aussie.

 

Todo se decidió en el punto del dobles. La paliza propinada a Barty más temprano exaltó la pasión de Mladenovic (¡aguas!) y pidió mano para el decisivo. Caro García, ardida por la bicicleta en que la dejó la chaparrita aussie el día anterior, enarboló ley del talión y la mancuerna celestial quedó formada.

 

Mladenovic entró lanzada al encuentro, con la adrenalina alta tras su contundente victoria unas horas antes (la jornada comenzó a las 21:00 de sábado occidental y concluyó alrededor de las 4:30 de domingo), mientras que la consumada doblista que es García Caroline se había recuperado rápido y Benneteau la puso al lado de la inminente reina, a condición de que a su experiencia la francohispana le agregase una gran dosis de actitud. Eso es lo que de sobra puso una encorajinada Mladenovic, decidida a ser la gran heroína para su país, consiguiendo de esta manera que Francia sumara su tercera Fed Cup, tras las conseguidas en los años 1997 y 2003. Por un marcador de 64 y 63, Francia ponía el definitivo de la serie en 3-2 y cerraba un fin de semana de ensueño para el tenis galo.

 

REFLEXIONES EN UN OJO DESVELADO

 

"No estoy segura de haberme dado cuenta por completo, porque ha sido un fin de semana

loco para todos", declaró García en la cancha, después de su histórica victoria con Kiki. "Los

dobles fueron muy rápidos, pero jugamos cada punto de manera concentrada, jugamos un

gran partido y fue muy tenso". Un instante antes, la hermosa campeona absoluta se alejaba del

micrófono tan conmovida como para no articular discurso. “Es muy emotivo compartir esto con

Caro después de que hace tres años fallamos en el último paso de la eliminatoria", pudo

balbucear Mladenovic durante la celebración en cancha. "Hoy solo queríamos jugar un poco

de venganza por nosotras mismas, y no se puede describir cómo nos sentimos en este

momento”.

 

El máximo campeonato mundial por países terminó con Mladenovic invicta en tres partidos

durante el fin de semana, incluyendo el dobles de 76 minutos que selló la victoria de Francia

. Una victoria estrecha y reñida después de que el equipo galo experimentase una derrota

muy reñida en su última final de la Fed Cup, cuando García y Mladenovic cayeron ante Karolina

Pliskova y Barbora Strycova, de la República Checa, en el partido de dobles en 2016.

 

Al comenzar la jornada, la victoria fue la segunda de Mladenovic sobre la Uno del mundo esta

temporada, ya que derrotó a la que entonces lo era, Naomi Osaka, en Dubai en febrero.

"Seguí peleando en cada punto, esa es la forma en que me encanta jugar mi tenis", dijo Mladenovic en la cancha después de su partido. "La No.1 del mundo Ashleigh es una gran campeona. Perdí el primer set, pero se trata de detalles. Cuando juegas con la Uno del mundo a este nivel, no puedes fallar y regalar oportunidades. Seguí creyendo porque sentí que estaba luchando y dando una dura batalla, y estoy tan orgullosa de cómo seguí presionando, y gané al final”. Y la diva se fue a preparar el match definitivo.

 

Con Australia a un partido de la derrota y su espalda contra la pared, la mamita croata que por Nick Kyrgios se hizo aussie, Ajla Tomljanovic, tuvo que sobrevivir a dos puntos de quiebre en su primer juego del partido. La francesa Parmentier salvó un punto de break para el 4-4, pero Tomljanovic tuvo dos oportunidades más para romper en 5-4. La australiana ganó un intercambio de 25 shots por toda la cancha para lograr el primer break del partido y terminar con la ventaja de un set.

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Tomljanovic se adelantó en segunda manga con poderosas devoluciones para romper a Parmentier para una ventaja de 4-2, y la australiana tuvo un punto de juego para consolidarse para una ventaja de 5-2. Pero Parmentier se adelantó para regresar a ese juego, y Tomljanovic hizo dos dobles faltas para hacer que la francesa volviese al saque. Después de un ace para mantener por 4-4, Parmentier estaba de vuelta en el meollo de las cosas.

 

Sin embargo, un profundo resto de servicio por parte de Tomljanovic obligó a Parmentier a cometer un error en la primera pelota de partido, y Australia volvió a igualar la eliminatoria con dos victorias cada una. En total, Tomljanovic ganó un asombroso 77 por ciento de los puntos con su segundo servicio, mientras avanzaba a la victoria de 92 minutos, que estaba muy lejos de su derrota por doble 61 ante Mladenovic el sábado.

"Estoy muy contenta de haber tenido una segunda oportunidad hoy, y la victoria nos mantuvo dentro", dijo una Tomljanovic despejada de su halo de misterio y con la franqueza que da la madurez. "Este equipo ha sido increíble toda la semana y ha sido un privilegio jugar para vosotros", refiriéndose al por sólo ese momento del día contentísimo público australiano.

 

Con la eliminatoria en un punto muerto una vez más, los dobles determinarían las vencedoras, y cuatro campeonas de dobles de Grand Slam se alinearon para resolver el marcador. Las australianas tomaron la delantera, Barty y Samantha Stosur, ya que García perdió su saque en el juego de apertura por una volea de Barty que forzó el error. Pero después de que las australianas llegaron a 2-0, el dúo francés comenzó a tomar el control.

 

Stosur rompió en blanco para poner el set nuevamente en igualdad de

condiciones en 2-2, pero la pareja francesa tuvo pocos problemas para

mantener su servicio el resto del set. Las australianas tampoco

volvieron a tener demasiados problemas hasta el 5-4, cuando García y

Mladenovic les dieron dos puntos de set en el servicio de Barty, que

perdió con todo y set.

 

El tándem francés extendió su liderazgo cuando Mladenovic lanzó un

golpe de revés a la línea para romper a Barty por segunda vez

consecutiva y ganar su cuarto juego consecutivo, llegando a 2-0 en el

segundo cartón. García inmediatamente tuvo que enfrentarse a tres

pelotas de break en su servicio en el siguiente game, pero salvó los

dos primeros y Mladenovic volcó a su equipo fuera de peligro en el

tercero, ya que logró un quinto game consecutivo y lideró 3-0. García

tuvo que evitar otro punto de break en su servicio con 4-2, pero se

aferró para dejar a su equipo a un juego del triunfo.

 

Las francesas se perdieron dos pelotas de partido en el servicio de Stosur en 5-2, pero, en el juego posterior, una volea devastadora de García forzó un error de Stosur en la tercera pelota de partido, dando la tercera victoria a Francia del fin de semana y la tercera Fed Cup en la historia para su nación.

 

La nueva diva francesa del tenis europeo comenzó la demolición del mito de Barty poco después de las 21:00 horas, hora de México. A las 11:40 se alzaba con el triunfo que ya queda de estigma para la machetona de horribles ojos. Vino luego el empate y para las 2:00 de domingo, ahora en dobles, Kristina y Ash volvían a chocar. Cerca de las 4:30, la pareja gala se proclamaba triunfadora del decisivo y  propietaria, con su team, por tercera ocasión de Fed Cup. Un promedio de ocho horas de acción en cancha, ganado TODO por Kristina Mladenovic.

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De colofón, la nota de PdB de esta mañana de domingo occidental: “No hay nada más satisfactorio para un torneo que año tras año el número de espectadores vaya en aumento. La final de la Fed Cup 2019 que se ha disputado este fin de semana en Australia ha sido la que más público asistente ha registrado en el continente oceánico en este torneo. La cifra de 26.951 espectadores demuestra una vez más que el tenis femenino VA. Posiblemente el gran momento de forma de Ashleigh Barty provocó que numerosos aficionados al tenis se hayan pasado estos días por las instalaciones”. La terca realidad dijo que no. Otra que no durará el año en la cima.


Así que Kristina Mladenovic se ha convertido en la gran protagonista en esta final de Fed Cup 2019, al ser partícipe de los tres puntos que ha conseguido el conjunto galo este fin de semana ante Australia. La jugadora gala confesó para el magazine francés L'Equipe cómo se

sentía en esos momentos: "Ha sido muy especial para mí lo que ha ocurrido este fin de semana. Hoy no tenía un partido nada fácil ante la mejor jugadora del circuito, que venía de jugar muy bien en estas últimas semanas y que contaba con el apoyo de toda la afición. No tengo dudas de que hoy ha sido uno de los momentos más hermosos y conmovedores en una cancha de tenis. En estos últimos años he podido ganar a jugadoras top ten y también a la número uno del mundo, pero esta ha sido sin duda la más especial. Ya que ha sido en una final de Fed Cup y representando a mi país".

 

Y como toda trepadora, convencida de la cultura del esfuerzo, Ashleigh Barty no pudo reprimir la tristeza tras haberse quedado a las puertas de poder hacer a Australia campeona de la Fed Cup 2019. Justo antes de la entrega de premios, se le vio desbordada por la situación a sabiendas de lo cerca que ha estado de poder hacer campeona al equipo australiano tras muchos años de sequía en este torneo. Emotivo llanto de Barty del que pronto se repuso y que aún no la quita de la cima…Al tiempo.

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