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SINIAKOVA, DOBLISTA UNO DEL MUNDO, SOMETE A OSAKA. SERENA, DERROTADA, HACE OTRO NUMERITO.

Oscar Rodríguez Gómez
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La última vez que una tenista especialista en dobles, número Uno del mundo en la modalidad, derrotase a una número Uno en singles en un match de individuales, fue en la  final del US Open de 1987, cuando Martina Navratilova venció a Stefanie Graf por 76 (4) y 61. El sábado primer día de junio, la checa Uno del mundo en dobles -42 de singles- provocó la mayor sorpresa de Roland Garros 2019, eliminando a la aferrada a su Uno agónico, Naomi Osaka, por 64 y 62 en tercera ronda de Roland Garros 2019.

 

Para mal del tenis en su concepto, y peor para los públicos que aún le creen, Serena Williams lo volvió a hacer. 62 y 75 fueron los guarismos con los que Sofía Kenin, todo esplendor y libertad con sus genes rusos y entrenamiento norteamericano, a los 20 años se ganó su lugar en la cuarta ronda de un Grand Slam por primera vez en su carrera, tras de abrirse camino en una victoria de 92 minutos sobre la legendaria bestia negra en el primer enfrentamiento de ambas. Es la primera victoria de Sofía sobre una Top 10 vigente (llegada ahí por connivencia y conveniencia indecibles) y su tercera sobre una Top 10 en toda su carrera. A la hora de comparecer ante los medios, la humillada Williams exigió a los organizadores que sacaran al del estrado, Dominic Thiem, para que se sentara ella. Hoy, una vez más, Serena morena es burla y reproche de tantos que poco a poco se convencen que el monstruo exterior está peor adentro.

 

Fue la máxima doblista del mundo quien fue superior a la

horrible puntera en singles del tenis femenil mundial, con un

juego multifacético y así alcanzar su quinta victoria ante una

Top 10, pero la primera sobre una jugadora Top 3. La experiencia

de dobles de Siniakova fue la clave para cerrar la victoria, dijo la

checa después. "Tuve algunos partidos en las canchas más

grandes aquí en dobles. Así que el ambiente es muy diferente

al de una pista más pequeña. Entonces, en este caso, me ayudó

con lo que se puede esperar y... seguro que ayudó. Mi juego, e

incluso la mentalidad".

 

Katerina, en lo que va del curso, a sus 23 años es campeona con

Aliaksandra Krunic en Sydney, y con Barbora Kejcikova finalista

en Indian Wells y semi en Roma. En contraste, la Osaka no ha

ganado un sólo torneo desde que el burro tocó la flauta en

New York 2018 y Melbourne este año al hilo. Salió de Dubai en

segunda ronda; en Indian Wells en octavos; en Miami en tercera; en Stuttgart en semi y en Madrid y Roma en cuartos de final. Tanto en California como en España, Belinda Bencic aparece como su verdugo de planta.

 

En este Internationaux francés, la mestiza logró remontadas asombrosas sobre Anna Karolina Schmiedlova después de estar a dos puntos de perder en múltiples ocasiones, y también sobre Victoria Azarenka, set abajo y un break en el definitivo, ahora fue incapaz ante una Siniakova dinámica y amplificada. Venía de un maratón de segunda ronda, donde derrotó a Maria Sakkari 76 (5), 67 (8), 63 en una montaña rusa de tres horas y 10 minutos, el quinto partido más largo de la temporada. Esa experiencia parecía haber incrementado la fortaleza de la checa. A pesar de quedarse atrás 0-40 mientras servía para el set, el drop shot, el golpe de derecha y el servicio de Siniakova la ayudaron a rechazar cuatro puntos de break para tomar la delantera.

 

"Fue valiente, pero creo en mi drop shot", Siniakova sonrió después del golpe que había ganado sus múltiples puntos cruciales. "Creo que es realmente bueno. Era un golpe que podía usar contra ella... En realidad, fue muy difícil terminar el set, y me sentí muy feliz de que me defendí y lo terminé".

 

Vertiginosa por toda la cancha, ofreciendo apenas seis errores no forzados en el segundo set y variando el ángulo y el giro, Siniakova demostró ser una pared que Osaka no pudo atravesar. Los errores continuaron para la haitiano-japonesa, hasta que una tercera doble falta la colocó en doble break. La humillada Naomi ofreció poca resistencia cuando Katerina sirvió, y una gran  derecha sobre la línea selló la victoria después. En su segunda semana de un Grand Slam en individuales por primera vez, Siniakova ahora se enfrentará con la cabeza de serie 14, la alegre Madison Keys.

 

“¿TENGO QUE SALIR DE LA SALA PARA QUE ELLA ENTRE?”

 

El cochinero que se le acumula a Serena Williams, con la vista gorda de los de pantalón largo tan bien pagados con dinero público (son Federaciones las de tenis, la lana viene del Estado) ya rebasa su insolencia en cancha para pasar a los medios, así que paf! se acabó. Es tan grande su resentimiento social y su patología cognitiva como para, sin darse cuenta (ignorantaza lo es), acelerar el cavado triste de su tumba.

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En lo “atlético” y deportivo, tan admirado por futboleros y gustosos del box, caer en tercera del Abierto de Paris ante una belleza 18 años menor y sin ninguno de sus macabros trucos, ya era noticia. Pero el “ordenar” que se suspendiera de prensa de Thiem para tomar ella el mic, fue el colmo. ¿Qué harán los medios otrora bien pagados por el siniestro Mouratoglou? Las primeras reacciones se escucharon en ESPN, donde se pasó una y otra vez el video de Thiem “despedido” de sala de prensa con gran enfado. “Hay campeonas que se creen diosas…cuando no son sino humanas”, dijo cáustico un cronista.


En lo “deportivo”, Sofía Kenin obtuvo su primer título de individuales en Hobart en enero y alcanzó el puesto más alto de su carrera (33) en marzo. El sábado, la gringuita logró el 61% de los puntos en el segundo servicio de Williams, y solo se dejó quebrar una vez de las siete oportunidades de

Williams. La bestia negra tuvo 30 ganadores frente a los 23 de Kenin durante el enfrentamiento, pero la ex número 1 se desintegró por 34 errores no forzados, exactamente el doble que Kenin disparó en el partido. ¿Muestra de senilidad?

 

Tras del vergonzoso 62 de primera manga, las combatientes por fin habían alcanzado una fuerza de golpe simultánea, ya que golpeaban la pelota entre sí con mayor intensidad para obtener ganancias de servicio hasta 5-5. Sin embargo, Sofia Kenin exhibió el valor que oculta a su corta edad al final del set,

cuando un gran error de derecha por parte de la legendaria negra generó la  oportunidad, y Kenin, usando su hermoso revés como la base de su juego, cerró la victoria en su segundo punto de partido.

 

Aceleradisima aún, destellando con el rojo de su vestido, la matadragonas cuenta cómo superó a la Williams: "Creo que hice un gran trabajo controlando mis emociones; en el momento de cerrar el partido tenía muchas cosas que procesar en mi cabeza, no era fácil", se sinceró Sofía, que seguía aún en una burbuja tras el partido. "Todavía estoy intentando procesar lo que ha pasado; antes del match sabía que estaba preparada para lo que se venía, así que estaba lista para ganar el partido", dijo.

 

"Cuando juegas contra Serena, tienes que controlar los

puntos, tienes que mandar, porque si no ella tomará el

control. Ella es la mejor de las mejores, sabía que jugaba

ante una jugadora 'top' así que salí a hacer mi juego. Jugué

realmente bien, ella se movió bien, metió muchas bolas

dentro, estoy muy feliz por lo que hice", explicó balbuceante

la aún adolescente Kenin.

 

Pero ni por asomo ahí termino todo. "¿Qué demonios es esto?

Realmente se trata de una broma, ¿no?" Así reaccionaba

Dominic Thiem después de ser DESALOJADO de la rueda de

prensa cuando Serena Williams apareció por allí. La

estadounidense no parecía tener muchas ganas de esperar

a que el austriaco finalizara su intervención ante los medios

de comunicación, e irrumpió en rueda de prensa con el beneplácito de los RESPONSABLES DEL TORNEO, que solicitaron a Dominic que saliera.

 

Cuando Serena terminó sus estupideces ante los medios, Thiem hizo patente su indignación. "¿Tengo que salir de la sala porque ella venga?". Finalmente, Thiem decidió irse también, siendo incapaz de contener su enfado: "Yo también me voy. No voy a estar aquí parado, tengo derecho a hacer lo que me dé la gana también". Y la polémica estalló entre quienes no conocemos la compasión.

 

Al mediodía de este domingo 2, lo ocurrido anoche con Dominic Thiem y Serena Williams está siendo objeto de debate en todo el mundo, al tener el austriaco que desalojar la sala de prensa para que entrara Serena, que había perdido minutos antes. Según Eurosport Alemania, Domi comentó sobre lo ocurrido: "No estaba enfadado o frustrado. Quizá solo en los primeros minutos. No importa si soy yo el que está sentado ahí. Me equivoqué en lo que dije, de que no era un júnior. Incluso si hay un júnior, cada jugador debe esperar. Muestra una mala personalidad, en mi opinión. Estoy 100% seguro de que Federer o Nadal nunca hubieran hecho algo así", tuvo que declarar, seguro bajo presión.

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¡Cómo se antoja ver la la semidiosa Kiki Mladenovic, la que en su época de cascos ligeros atosigaba todo a través de los medios! ¿Saldrá en defensa de su novio o se regodeará con la viva imagen de la derrota y la amargura de la diosa arrodillada? Aceptables indicadores al respecto las reflexiones de Sofía Kenin este domingo: “Es fantástico sentirse tan apoyada por el público. Esas cosas son las que me hacen creer más en mí misma y seguir luchando. Creo que el hecho de que me apoyen tiene la explicación de que soy una gran persona, tanto dentro como fuera de la cancha. Es cierto que también el público suele decantarse más por los tenistas que conoce bien respecto a otros más desconocidos, pero es una gran sensación la verdad.", desveló la estadounidense.


"Está siendo una temporada muy dura. Esperaba poder desplegar el nivel de tenis del que hice gala el año pasado,

pero las cosas no salen y sigo sin encontrar mi forma física ni el ritmo necesario para competir". La cuenta atrás de cara al siguiente gran evento ya ha comenzado para Serena Williams, que puede extraer muchas enseñanzas de un partido en el que se ha visto superada de principio a fin por Sofia Kenin. Se supone que no hay que desestimar a las leyendas, pero mucho menos a los nuevos valores.

 

Kenin se enfrentará a la cabeza de serie número 8, Ashleigh Barty, de Australia, en la ronda de 16. Barty derrotó a Andrea Petkovic simultáneamente al partido Kenin / Williams, con el luminoso en 63, 61.

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