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SVITOLINA, ARTISTA SOLITARIA ENTRE LAS MÁS RUDAS Y MAÑOSAS.

Oscar Rodríguez Gómez
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La revelación checa empezó con dudas desde la ejecución de algunos golpes y eso le costó el primer quiebre. Sin embargo, pudo ajustar los tiempos para tomar la iniciativa de los puntos. Eso le permitió no solo recuperar esa ventaja sino también lograr otro quiebre para ponerse 4-1. De ahí, Svitolina comenzó a variar más sus tiros y poco a poco se fue metiendo nuevamente en el partido.


 La ucraniana generó dos oportunidades de quebrar cuando Muchova sacaba para el set y no las desaprovechó. Minutos más tarde, tras la confirmación del quiebre, la paridad volvería al marcador. El décimo juego fue un punto de inflexión: un juego largo lleno de buenos intercambios y grandes ejecuciones en el cual Svitolina, en su quinta oportunidad, logró el quiebre. Ya sacando

Elina Svitolina era una de las jugadoras llamadas a ejercer el relevo generacional en el circuito femenino, pero de su generación: entre 24 y 28 años. El ejército millenial, todavía tembeleque, sólo aguantó la primera semana en Wimbledon. El tramo final del Championships de Londres, de nuevo entre las ya casi veteranas.

 

27 años Simona Halep, 39 la Williams menor y 33 la redimida Barbora Strycova.

Todas peleadoras callejeras, sin un metro de visión más allá del aspecto rudo

(deportivo, que le dicen) de su muy tenis. Lejanas las tres de la vida diaria en

el jet set, sometidas al encanto del gimnasio y los tormentos de sus coaches,

envidiosas hasta lo dragónico y todo ello reflejado en su proxemia y su mirar,

son las tres sotas de lo que podría haber sido póker de Reinas.

 

La irregularidad que Elina Svitolina ha manifestado en este 2019 ha dejado con

muchas dudas a la jugadora ucraniana, que llegaba a Wimbledon sin

expectativa alguna. Contra todo pronóstico ya está en semifinales. Svitolina

consiguió derrotar a la gran revelación del torneo, la checa Karolina Muchova,

por 75 y 64 en una hora y 31 minutos de juego. En semifinales, la jugadora nacida

en Odesa chocará a muerte con Simona Halep.

 

Svitolina y Muchova son estilos de juego muy diferentes. Con Elina tratando de ser muy consistente y ordenada para construir los puntos poco a poco y Muchova apoyándose más en la creatividad y la intuición.

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para el set, la ucraniana no iba a titubear y se llevaría el parcial por 75.

 

La checa empezó mejor el segundo set con un quiebre a su favor en el segundo juego. Sin embargo, esta ventaja no duraría mucho porque Svitolina recuperaría rápidamente. El cuarto juego fue importante para la ucraniana puesto que salvó dos puntos de quiebre. Ya con más confianza y con Muchova mucho más cansada, la ucraniana seguiría sumando juegos a su favor.

 

 Sacando para el partido, Svitolina mostraría los típicos nervios que aparecen

en esta instancia y cedería su servicio por segunda vez en el set. Ya en su

segunda oportunidad, Elina por fin cerraría el segundo parcial por 64. Así

termina la historia.

 

Lo nuevo será el resultado en semifinales. Las números 7 y 8 del ranking WTA,

con sólo tres años de diferencia (mayorcita ya Simona) van por todo por el

bien del tenis. Quieran los hados que la maldición de la bestia negra no intente

siquiera regresar, siempre apoyada por lo más abusador del Poder.

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