El que debió ser un bonus disc y que acabó cobrándose como nuevecito, reúne según eso la totalidad de las rolas creadas durante el viaje que significó “Egypt Station”. Van desde las grabadas en estudio, donde destaca la versión larga del hit original de “Egypt…”, la sorprendente 'Get Enough', hasta shows en vivo capturados en conciertos de lo que va del año en Abbey Road Studios, en la aún viva y emblemática The Cavern y hasta en Grand Central Station.
LA PERRA HA VUELTO
“¿Cómo fue tu infancia, Elton?”, pregunta Sebastian Rich en la introducción al Soundtrack Original de “Rocketman”, el cacareado biopic de Sir Elton John quien responde, en voz de Taron Egerton, con chicas del coro y todo:
I was justified when I was five
Raisin' Cain, I spit in your eye
Times are changin' now the poor get fat
De hecho, la película arranca con la llegada de su protagonista a una reunión de alcohólicos anónimos que servirá como hilo conductor para repasar diferentes etapas de su vida. Sin embargo, son las canciones las que sirven para hacer avanzar la trama en lugar de servir como un hecho aislado más o menos memorable. El primer súper número musical, “Saturday night is allright for fighting”, resulta ambientado en un pub victoriano, y no en las entonces nacientes discotheques o de plano en las calles, como lo muestra el cover que a la rola le hicieron The Who.
Y es que Rocketman se aleja mucho de los mejores biopics de artistas musicales de la historia del cine: Bird (1988), sobre Charlie Parker; Last Days (2005), sobre Kurt Cobain; I’m Not There (2007), acerca de Bob Dylan; Control (2007), la vida y muerte de Ian Curtis (Joy Division); The Runaways
TENIS, CINE & ROCK AND ROLL
Página del Oscarito, para leer sin prisa.
MARÍA SOBREVIVE A LA TERCERA. ¿BARTY “JUGARÁ” CON ELLA?
Oscar Rodríguez Gómez
Tras de una hora y 55 de partido en el Premier 5 de Cincinnati, la leyenda rusa María Sharapova logró pasar primera ronda. Inconcebible lead para quien fuera 21 semanas dueña de planeta tenis y también propietaria de todos los Grand Slams, incluyendo el de Carrera y el de Plata y además el Magisterio WTA 2004. Hoy lunes 12 de agosto, Masha luchó por su derecho a la existencia en el planeta de su pasión.
Con un resultado en apariencia simple, pero con tintes dramáticos tan del gusto de la
poderosa rubia, fueron sets corridos de 63 y 76 (4) por encima de Alison Riske (37),
norteamericana bien portada en todo momento. Quedó atrás el auge de una mujer
triunfadora en todos los aspectos de la vida, hasta que el muro de la negra Williams la
contuvo no sólo a ella sino a dos generaciones. “Me encanta jugar con ella”, decía la
bestia negra cada Slam o Premier en que jugaban la final con siempre el triunfo para
Williams después de 2005.
El doble sentido de la malévola resentida social siempre quedó claro: Masha, el
juguete consentido de la Williams. Y como Sid, el villanuelo del primer Toy Story, el
gusto de la dueña de 23 Slams era someter al potro a la bella hasta exprimirla. O lo que
es lo mismo, destruirle el ghost, tipo la negrada y los supremacistas tan bien puestos
en su lugar por Spike Lee en “BlackKlansman”.
En lo técnico, la primera manga no tuvo mucho chiste. Pero ya se sabe que a Masha, si gana la inicial, todo se le complica en la segunda, la pierde y drama en tercera, casi siempre con derrota. Este lunes las cosas cambiaron. Ya avisaba en Toronto desde el momento en que ni lloró, ni se encerró tres días y además compareció al instante ante los medios, rubicunda y sonriente, pese a perder primera ronda ante una insulsa francesa.
¿Será Riccardo Piatti y su magia? Los números no son nada especial: 5 aces de la rusa por 3 de Alison y 7 doble faltas de María por 9 de la gringa. Un primer servicio indigno de campeonas, apenas el 67% de Masha por un cercano 63% de Riske; un segundo saque levemente mayor de 77% y 64% para Sharapova, quien se vio mejor en convertir las bolas de break al 40% frente al 43% de su rival. Pero tampoco mucha diferencia. ¿Cómo le hizo Masha para acabar con 86 puntotes ante los 73 de Alison? Ni la misma diva lo sabe.
El principal portal español, tan ávido de Sharapova hace ocho días (hay que impedir su retiro; es figura, tiene toda la lana y sus fans al borde de la histeria en cancha y la angustia en el pensamiento) dedicó hace un momento las siguientes brevísimas líneas: “Maria Sharapova pudo sonreir en su debut en Cincinnati. La rusa tuvo que recurrir a la muerte súbita en la segunda manga pero dominó a Alison Riske para meterse en segunda ronda”.
El miércoles 14, la sufrida pero billetuda chulada podrá en definitiva librarse del maleficio. Se espera que no sea para conjurar uno nuevo ante la machetona trepadora social de Australia. Y seguro que la USTA se frota las manos: no importa que la eterna superestrella esté refundida en el 97 del ranking. Es cartel y vende entradas a Flushing Meadows, sede de US Open 2019.