Durante el sábado, un video del Pop Star Harry Styles, ya también todo un actor de cine, arribando al aeropuerto de Cancún salió a la luz. En éste, Harry saluda a un empleado y ve a la cámara directamente. Todo parecía estar a la perfección, hasta que dicho empleado posteó en su Facebook que el cantante, actor y modelo de Gucci había sido grosero al no permitirle tomarse una foto con él, y que por eso su carrera como músico era un fracaso, y para hacer énfasis en su descontento publicó la información del vuelo en el que el cantante había viajado.

 

Las seguidoras pronto comenzaron a defender al cantante y argumentaron que sólo

estaba cansado y por eso no se quizo fotografiar. Otras fans decidieron ir más allá y dar

aviso a American Airlines, la compañía aérea en la que el cantante viajó. Se informó que

uno de los empleados había roto las reglas y filtrado información del vuelo. La noticia se

viralizó hasta las cuentas de otros países que se dedican a dar seguimiento al cantante, las

que tradujeron los datos a sus respectivos idiomas.

 

Harry Styles, como era de esperarse, ya comienza su borrachera de poder y, tras de

enloquecer a sus fans con su llegada al caribe mexicano se fue directo a los negocios y

alquiló (los medios dicen que la “compro”) toda una colonia popular para ahí grabar su

nuevo clip.

 

Styles “compró” a varios cientos de personas sus casas para usarlas por un día y parte de

una noche, para así poder grabar sin interrupción cada una de las varias escenas de las

que seleccionará lo pertinente para su nuevo video musical.

 

Resulta que Styles no vino a Cancún de vacaciones como se esperaba, sino que fue por un

asunto laborar, lo que se supo durante la tarde del sábado cuando varias personas vieron al cantante británico caminar en las calles de la colonia “Lombardo Toledano”, en la salida a Puerto Juárez.

 

Con toda discreción, desde hace dos semanas el grupo de locaciones llegó a los domicilios que se ubican en la segunda entrada del fraccionamiento “L. Toledano” mencionado a verificar las casas que se ubican en la zona y así negociar con los propietarios el alquiler (“compra”) del inmueble por un día.

 

Fue así que toda la colonia permaneció secuestrada por el actor y cantante junto a su equipo de producción quienes vaciaron la zona, puesto que no permitieron que nadie circulara por los alrededores. Esto incluyó desde luego el uso de transporte público como lo es la concurrida ruta 6 que conecta Puerto Juárez con Cancún y las usuales quejas de los usuarios ni se dejaron escuchar.